lunes, 31 de marzo de 2014

En mis pruebas duras

EN MIS PRUEBAS DURAS

“Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados… para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo” (Rom. 8:28, 29).

Todo lo que pasa en mi vida aquí,
Mi Dios lo prepara para bien de mí,
En mis pruebas duras, Dios es siempre fiel,
Pues, ¿por qué las dudas? Yo descanso en Él.

Plagas y la muerte hay en derredor;
Ordenó mi suerte El que es Dios de amor.
Ni una sola flecha me podrá dañar;
Si Él no lo permite, no me alcanzará.

A los que a Dios aman
Todo ayuda a bien,
Esto es mi consuelo,
Esto es mi sostén.

“¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más bien, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros. ¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia?… Antes en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de él que nos amó” (v. 34, 35, 37).

Del amor divino, ¿quién me apartará?
Escondido en Cristo, ¿quién me tocará?
Si Dios justifica, ¿quién condenará?
Cristo por mi aboga, ¿quién me acusará?

Más que vencedores aun en aflicción,
Nada nos separa del amor de Dios.

En mis pruebas duras, Dios está haciéndome más como Jesús (27). Él suplirá todas mis necesidades (v. 32). Nadie me condenará (v. 33). Jesús está intercediendo por mí (v. 34). Dios me está amando (v. 35). Yo saldré vencedora con creces (v. 37). Nada puede separarme del amor de Dios (v. 39). Por lo tanto, no permitas que el enemigo te acuse de que todo es por tu culpa y, como culpable, no puedes acercarte a Dios, porque eres indigna, que Dios no te está amando, sino castigando. En absoluto. Dios, en su amorosa soberanía ha permitido esta prueba y su amor por ti te sostendrá. Vive en ella. Si en parte es por tu culpa, confiesa tu pecado, recibe el perdón por medio de aquel que te amó y se entregó a la muerte por ti. Ve en sus intercesiones a tu favor su fiel amor. Bajará el cielo todo lo que necesitas, porque te ama, porque en amor te escogió para ser su amada hija.  A los que aman a Dios y a aquellos a los que Dios ama, todo ayuda a bien.

Enviado por  Hno. Caballero


viernes, 28 de marzo de 2014

Alguien necesita saber

Una vez más es un día maravilloso para compartir la esperanza, la vida, el amor de Dios y su Palabra que penetra hasta los tuétanos de los huesos.  De seguro hoy alguien necesita saber que  de todo corazón, con todo su ser, puede acudir a la bondad y el poder de Dios.

Comparte este mensaje: Salmos 145.18 Cercano está Jehová a todos los que le invocan, a todos los que le invocan de veras.

El Juicio

El Juicio

Leer | 2 CORINTIOS 5.9, 10



Todo cristiano es responsable ante el Señor Jesús de cómo vivió. No comparecemos delante del gran trono blanco de Apocalipsis 20.11; allí es donde serán juzgados los incrédulos. En vez de eso, estaremos delante del tribunal de Cristo para dar cuenta de nosotros mismos.

Tal vez esto parezca una contradicción: los creyentes no serán juzgados, sino que estarán delante del tribunal de Cristo. La palabra griega que usa 2 Corintios para “tribunal” es bema, que significa “lugar de rendición de cuentas”. Por eso, quienes creemos en el Salvador no seremos condenados, sino que viviremos y le rendiremos cuentas.

No hay que confundir la responsabilidad con ofrecer una defensa. No defenderemos nuestras acciones sin valor —esas cosas que dijimos e hicimos, que no trajeron honra al Señor o que deshonraron su nombre. Dios asemeja nuestras obras egoístas a madera, heno y hojarasca, que son cosas que solo sirven para el fuego (1 Co 3.13). Las palabras, las acciones de valor y los pensamientos serán premiados en el cielo.

Lo que será juzgada es la calidad de nuestro trabajo. Dios ha dado a cada creyente un propósito específico, junto con la personalidad, los talentos y los dones espirituales necesarios para llevarlo a cabo. La pregunta que será respondida en el tribunal de Cristo será: ¿Viví en realidad mi decisión de honrar y glorificar a Dios?

Estar de pie ante el tribunal de Cristo es algo que anhelamos. No tenemos que temer, ya que somos amados coherederos con Cristo (Ro 8.17, 34). Por su sacrificio, tenemos derecho a los tesoros del cielo. Él está deseoso de repartirlos como recompensa por la fidelidad y la obediencia.

Por Min En Contacto

jueves, 27 de marzo de 2014

Santificado sea tu nombre

“SANTIFICADO SEA TU NOMBRE”



“Santificado sea tu nombre” (Lu. 11:2).

            Jesús acaba de enseñar a sus discípulos cómo orar. Les ha dado por modelo el Padre Nuestro”. Ahora procede a corregir algunas ideas equivocadas que podríamos tener acerca de Dios. Es fácil juzgar a Dios y acusarle de indiferente, lejano, agarrado, de difícil acceso, con motivos mezquinos, que no nos atiende por capricho, porque quiere que suframos más antes de responder a nuestras peticiones de ayuda, porque lo hemos hecho mal y merecemos sufrir. Jesús está corrigiendo todas estos conceptos equivocados en Lucas 11:5-13.

En el ejemplo acerca del hombre que pide pan a medianoche, Jesús enseña que su amigo se levanta y se lo da por amor a su propio nombre, para defender su reputación, para no faltar en su obligación como persona. Aunque el que llama no fuese su amigo, sino un extraño, se lo daría porque es su deber social. Tenemos que abundar un poco más en esta idea para comprender más acerca de la motivación de Dios al atendernos. Es una buena motivación atendernos porque somos sus amigos, pero si no somos muy buenos amigos, ¿qué?; ¿tenemos menos garantía de ser atendidos? A veces fallamos. Si dependiera del grado de nuestra fidelidad como amigos, podríamos tener dudas si Dios nos atenderá o no. Pero si depende de la suya, ya salimos de dudas. Estamos seguros de recibir lo que necesitamos. Ya hemos descartado la interpretación de que todo depende de nuestra insistencia. Esto pondría una carga insostenible sobre nosotros, crearía mucha inseguridad. ¿He orado suficientes veces? ¿Me atendería si más gente ora por mí? ¡Estas ideas no son enseñadas aquí!

            Lo que Jesús está haciendo es un pequeño comentario del “Padre Nuestro”. Nos ha enseñado a orar: “Santificado sea tu nombre”. ¡Dios contesta nuestras oraciones por amor a su nombre! No por mérito nuestro. Debemos meditar más en esta idea. El amigo se levanta de la cama por amor a su nombre, por amor a su reputación, no porque el otro es su buen amigo. Si fuese solo un conocido, ¿ya no lo haría? No. Lo hace por amor a su nombre, y Dios es motivado por lo mismo. ¡Él contesta mis oraciones “por amor a su nombre”! ¡Esto me da toda seguridad! No soy digna. Fallo. ¿Por qué me va a escuchar a mí? Para que su nombre sea santificado y glorificado. Dijo el salmista: “Me guiará por sendas de justicia por amor a su nombre” (Salmo 23:3). Me hace justo por amor a su nombre, ¡no el mío! Me justificó en Cristo para la gloria de su nombre, y me  ayuda a vivir justamente ¡para que yo le glorifique!, para santificar su nombre.  

            “Por lo cual Dios no se avergüenza de llamarse Dios de ellos; porque les ha preparado una ciudad” (Heb. 11:16). Aquí tenemos la misma motivación: Nos ha preparado una Ciudad por amor a su nombre, ¡porque le daría vergüenza si no lo hubiese hecho! ¡Tendría vergüenza al ostentar el nombre de Dios!

            A fin de cuentas, todo depende de Dios, no de mí. Yo no soy el centro del universo, la causa detrás de todo lo que ocurre, lo es Él. Yo soy pequeña y finita, de poca monta, pero el soberano Dios de los Cielos me atiende a mí por amor a su nombre, para santificar eternamente y para siempre el nombre del Dios de Israel.

Por Ptor David Burt

Propósitos divinos

Amado hermano y hermana en Cristo eres sumamente especial para Dios, Jesús derramó su sangre para darte perdón de pecados, paz, comunión y vida eterna, la Voluntad de Dios es que sus propósitos divinos se cumplan en tí. Hay momentos que tendremos que asirnos muy fuertemente a esta verdad, ir contra todo lo que amenace, poniéndonos de acuerdo con Dios y su Palabra.

Como lo expresa el Salmo 138.8  Jehová cumplirá su propósito en mí; tu misericordia, oh Jehová, es para siempre; no desampares la obra de tus manos.

miércoles, 26 de marzo de 2014

Peticiones de oración

Clamando muy especialmente por:


  • Por todos los hermanos en viudez y ancianidad 
  • Por todos los huérfanos y niños desantendidos, maltratados, con necesidades especiales, empobrecidos, abusados en cualquiera de sus modalidades, esclavitud de cualquier tipo etc.
  • Incluír lugar en el Calendario Pasaporte Misionero de hoy
  • Para que Dios toque corazones que aporten en las necesidades para material de oficina, evangelismo, intercesores, colaboradores, donaciones, ofrendas en especies o monetaria

Pedir por Jerusalén



En nuestras oraciones diarias debe estar presente el orar por Jerusalén, toda la tierra de Israel y sus habitantes, recordando que son el pueblo con el cual hizo Pacto y por el cual fuimos alcanzados los demás pueblos con bendición.


  • Podemos pedir por su paz
  • Sean prósperados ellos como quienes le aman
  • Haiga paz dentro de ella
  • Puedan tener descanso
Lectura sugerida Salmos 112

martes, 25 de marzo de 2014

Se sabio

A las personas nos gusta ser entendidos según las materias, áreas de sociedad o gustos personales. Las Sagradas Escrituras nos da consejo para ser entendido, prácticar los
mandamientos, es conocerlos, aplicarlos para vivirlos, es decir cumplirlos.

Leemos en Salmos 111.10  El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; buen entendimiento tienen todos los que practican sus mandamientos. Su loor permanece para siempre.

lunes, 24 de marzo de 2014

ELÍAS


 El odio de Elías por los pecados de Israel brotaba de su fuerte amor por el
pueblo de Dios. Él no aborrecía a la gente, sólo al pecado. Él no era un
 hombre vengativo, sino un hombre cuyo corazón anhelaba que Israel retorne al
Señor. Para entender el espíritu y el poder que estaba sobre Elías, debes
escuchar su clamor desconsolado en el Monte Carmelo: “Respóndeme, Jehová,
 respóndeme, para que conozca este pueblo que tú, oh Jehová, eres el Dios, y
que tú vuelves a ti el corazón de ellos. Entonces cayó fuego de Jehová…
Viéndolo todo el pueblo, se postraron…” (1 Reyes 18:37-39).

Elías no estaba en absoluto interesado en ser reconocido como profeta. Sólo
quería ver la honra de Dios restaurada y al apóstata de corazón “volviendo
 su corazón”. Los verdaderos profetas, a pesar de que aparenten ser duros
 contra el pecado, son de corazón misericordioso, bondadoso y paciente. Y
cuando ven un verdadero arrepentimiento bíblico, son constructores y
 restauradores de brechas.

Creo que hoy en día existe una ‘compañía de Elías’ de verdaderos
pastores. No todos los predicadores son apóstatas o egoístas. Oigo de un gran
 número de pastores santos que han sido heridos y rechazados por ovejas
 indiferentes. Algunos están siendo literalmente expulsados de sus iglesias por
 predicar principios santos. Pero lo más cruel de todo, son las llamadas
 profecías y denuncias de “voces proféticas” duras, que no tienen piedad
 ni cualidad redentora para ellos.

 Si alguna vez escuchas a un “profeta” pronunciando maldiciones sobre
cualquier persona, puedes estar seguro de que no está andando en el Espíritu
 de Cristo. A menudo es un soberbio, autoproclamado Elías, lleno de arrogancia
 y lujuria. La Palabra dice claramente: “Bendecid y no maldigáis”(Romanos
 12:14). Aquéllos que andan hablando sobre maldiciones debieran estremecerse
 ante estas advertencias: “Amó la maldición, y ésta le sobrevino; Y no
 quiso la bendición, y ella se alejó de él. Se vistió de maldición como de 
su vestido, Y entró como agua en sus entrañas, Y como aceite en sus huesos”
 (Salmos 109:17-18).

 La compañía de Elías se compone de un pueblo que llora y cualquier palabra
 profética que sale de sus labios está bañada en lágrimas. En
quebrantamiento y dolor piadoso, caminan en arrepentimiento. Se niegan a
guiñarle el ojo a pecado y no temen a hombre o demonio cuando se trata de 
 defender el honor de Cristo.

Por Ptor David Wilkerson

Dispuesto mi corazón

Muchos son los que están dispuestos a seguir la mayoría, las corrientes que se generan en los grupos, redes, noticias, novedades, lo "in" o moderno. Muchos aceptan invitaciones de sus amistades cristianas incluso para visitar el templo, bien dispuestos, se preparan, saludan, comparten, cantan himnos ... y todo ello es bonito, algunos dicen pasar un buen tiempo y no hay nada de mal en ello.  Ahora bien más  importante es que ayude a reflexionar que lo antes mencionado se puede hacer como respuesta repetida, lo que otros llaman mecánicamente, por lo que ven y repiten, complacer a otros y demás, pero para alabar y adorar a Dios hay que ir un paso más allá, hay que disponer el corazón, entender que necesitamos el toque de Dios en nuestras vidas y entonces se generará espontáneamente en nosotros cántico a Jehová.

Que podamos expresar con libertad y sinceridad 
Mi corazón está dispuesto, oh Dios; cantaré y entonaré salmos; esta es mi gloria.  
Salmos 108.1

viernes, 21 de marzo de 2014

El Secreto del contentamiento

El secreto del contentamiento

Leer | FILIPENSES 4.4-13



En la lectura de hoy, el apóstol Pablo dice que había aprendido el secreto de tener contentamiento en todas las circunstancias, buenas o malas. ¿Le sorprende que él
escribiera esto cuando estaba en la cárcel?

Con frecuencia estamos descontentos, incluso cuando todo va bien. Por consiguiente, nos preguntamos cómo es posible tener contentamiento durante nuestras pruebas más difíciles. Entonces, ¿qué es el contentamiento? Pablo está hablando de una libertad de las preocupaciones y frustraciones de cualquier cosa en la vida, incluso de los deseos no satisfechos.

Por lo general, es cuando no podemos controlar o cambiar nuestra situación, que nos sentimos descontentos. Si dejamos que nuestra satisfacción dependa de ver realizadas ciertas cosas, las circunstancias nos robarán la paz. No estoy diciendo que exista un momento en la vida en el que nunca más volveremos a experimentar ansiedad o frustraciones. Pero lo que importa es cómo responderemos cuando esos sentimientos se apoderen de nosotros.

Esto es algo que el apóstol tuvo que aprender. Pablo padeció desde naufragios y hambres, hasta encarcelamientos injustos y palizas (2 Co 11.24-30). Había pasado por innumerables situaciones, que eran inciertas, dolorosas, y al parecer irremediables. Pero finalmente descubrió que el contentamiento no dependía de sus circunstancias.

¿Cómo responde usted cuando las circunstancias están fuera de su control? ¿Se enoja? ¿Trata de escapar? ¿Se da por vencido? Pablo decidió entregar sus ansiedades a Jesús a cambio de una paz "que sobrepasa todo entendimiento" (Fil 4.7). ¡Esa misma paz está disponible para usted!

Por Min En Contacto

Bendice a Dios por...

Hoy puedes incluír en tu devocional personal estas palabras dedicándolas con todo tu ser al Señor, reconociendo su persona y parte de lo que recibes de Él como bendiciones.  Hoy puedes decir:

Bendigo a Dios por:


  • Que es Dios
  • Su Santo nombre
  • Sus beneficios
  • El perdón de mis iniquidades
  • Sanar mis dolencias
  • Que me rescata
  • Sus favores
  • Sus misericordias
  • Por el bien y alimentos
  • Rejuvenece con su Espíritu
  • Su justicia
  • Defenderme
  • Su clemencia
  • Conocer mi condición
  • El poder de su Palabra
  • Su Voluntad
Lectura sugerida Salmos 103

jueves, 20 de marzo de 2014

¿Afligido?

En momentos que estamos sumidos en una inmensa aflicción hasta las palabras faltan para expresar lo que sentimos, o bien, no sabemos como presentar nuestra causa delante del Señor. La Biblia es excelente es mostrar ejemplos que podemos usar como guía de ayuda.  Puede que estés o  no afligido hoy, pero de seguro cuando estés en en el momento de aflicción te será muy útil esta palabra:

Jehová, escucha mi oración, y llegue a tí mi clamor. No escondas de mí tu rostro en el día de mi angustia; Inclina a mí tu oído; apresúrate a responderme el día que te invocare.  Salmos 102.1-2

Incendio

NUESTRO INCENDIO

“Bendito el Señor; cada día nos colma de beneficios el Dios de nuestra salvación. Selah” (Salmo 68:19).
            Pertenecer a la familia de Dios aporta bendiciones de muchas índoles. Ayer por la noche volviendo del culto de Igualada, al salir del túnel del Bruc vimos el humo de un gran incendio a lo lejos y David se dio cuenta de que venía del sentido de Vallirana, nuestro pueblo, que quedaba a unos 40 kilómetros distante. Casi enseguida un amigo llamó confirmando sus sospechas. Seguían montones de llamadas de hermanos preocupados por nosotros que habían visto las noticias por la televisión. Llamaban de todo el país asegurándonos  de sus oraciones y ofreciendo ayuda y alojamiento si hacía falta. Se formaron varias cadenas de oración ¡que extendían hasta Andalucía! Muchos llamaron a otros para no molestar y estos otros les informaban. Los que no se enteraron hasta que el peligro había pasado todavía estaban a tiempo para dar gracias a Dios por su cuidado. ¡Esta es la familia de Dios! Es muy hermosa. Nos preguntamos conmovidos, ¿qué hemos hecho para merecer tanto amor? Y confesamos que no lo merecemos; nos aman porque le amen a Él.

            Pues, cuando llegamos a casa se veían las llamas. Todo el monte al lado derecho de nuestra casa ardía. Los vecinos estaban en la calle, preocupados, mirando las llamas, cómo se iban acercando. Llegaron a estar a un kilometro de nuestra casa, pero, gracias a Dios, el viento soplaba en dirección contraria. Cayó la noche y los helicópteros que echaban agua y los bomberos tuvieron que retirarse hasta la mañana. Pero Dios no se retiró. Mandó una tormenta que apagó el fuego. Todo el día de hoy se oían los helicópteros volar por encima de casa vigilando y echando agua para asegurar que el fuego esté bien apagado.

            Como creyentes siempre reflexionamos cuando pasan estas cosas. Cuando tienes que desalojar tu casa es una experiencia muy solemne. ¿Qué vas a llevar contigo? Casi nada: el contenido de una maleta pequeña con lo necesario para pasar la noche, nada más. No estamos atados a lo material. En experiencias así lo vivimos. Y también vivimos la paz sobrenatural de Dios. Cierras tu casa, te metes en tu coche y dejas atrás todo cuanto tienes en manos de Dios, y eso, con mucha paz. Tenemos un Dios que controla vientos y lluvia para llevar a cabo su voluntad. ¡Los vecinos de Vallirana no saben lo afortunados que fueron al tener tantos cristianos orando por ellos, ni cuánto les deben! ¡El Señor ha contestado las oraciones de muchos y ellos se han beneficiado de sus oraciones! El Señor protegió todo el pueblo y no hubo daños personales. Ojalá todos aprendan la lección, que la vida es muy frágil; todo puede cambiar en un momento; lo único que podremos llevar con nosotros en aquel Gran Día, cuando toda la tierra sea incendiada, es lo que tenemos en el corazón.

Por Ptor David Burt

miércoles, 19 de marzo de 2014

Peticiones de oración

Orando por:


  • Los desempleados muy especialmente por la familia de la fe y sus necesidades
  • Los inmigrantes, procesos, necesidades, familias, leyes entre otros
  • Incluír lugar del calendario en Pasaporte Misionero
  • Por gracia, fortaleza y bendición del Señor en el cumplimiento de evangelismo, misiones, mensajes, citas, compromisos, capellanía y demás

Reconocer

Es un elemento maravilloso con el que contamos reconocer, es decir, distinguir, identificar, éxaminar, dar fe autenticando algo o alguien, admitir aceptar palabras o actos.  Tenemos a diario información reconociendo políticos, mágnates, científicos, celebridades y más. Y hay personas, grupos, comunidades que les falta reconocer a la persona más influyente, importante, única, extraordinaria, de mayor poder y dominio, a Dios.  Sin Él nada de lo que es o conocemos existiera.  Cada día debemos reconocer a Dios y su mano de bien en nuestras vidas.

Reconoced que Jehová es Dios; El nos hizo, y no nosotros a nosotros mismos; pueblo suyo somos, y ovejas de su prado. Salmos 100.3

¿Que podemos dar?

Palabras celebres, elocuentes, impactantes, recordadas y asumidas por otros; ejemplo digno de imitar, similar a:  No digas, que puede hacer el país por mí, sino, que puedo hacer yo por el país. Si consideramos y nos ocupamos apasionadamente por hacer valer con nuestras vidas esta expresión, dejando
el egoísmo aislado e individual de bienestar por uno compartido y de comunidad se obtienen grandes resultados. Los que lo han implantado ya lo disfrutan.  Cuanto más debemos apasionadamente ocuparnos de hacer valer e implantar que es digno de ocuparnos tanto individualmente como en comunidad de agradecer, honrar y reconocer a Dios que nos permite disfrutar la vida.  Pongamos en práctica la
 muestra de reconocimiento, respeto o consideración manifiesta hacia ÉL como prueba de agradecimiento o admiración.  En vez de recibir todo el tiempo ocuparnos también en dar, ¿Que podemos dar?: 


  • Tributo 
  • Glorificar su nombre
  • Hablar de su poder
  • Honrar su nombre
  • Dar ofrendas
  • Llegar a sus atrios (templo)
  • Rendirle adoración
  • Reverenciarle
Podemos leerlo en Salmos 96.7-9 Tributad a Jehová, oh familias de los pueblos, dad a Jehová la gloria y el poder. Dad a Jehová la honra debida a su nombre; traed ofrendas, y venid a sus atrios. Adorad a Jehová en la hermosura de la santidad; temed delante de él, toda la tierra.

martes, 18 de marzo de 2014

Proclama

Es un privilegio poder hablar a otros de Dios. Cada día podemos proclamarle en medio de nuestra familia, vecinos, amigos, conocidos, compañeros de estudio o trabajo. Testificar su obra en nuestras vidas.

Proclamad entre las naciones su gloria, en todos los pueblos sus maravillas. Salmos 96.3

lunes, 17 de marzo de 2014

Confiando en la Iglesia

CONFIANDO EN LA IGLESIA

“Ponte a la puerta de la casa de Jehová, y proclama allí esta palabra: Oíd palabra de Jehová, toda Judá, todos los que entráis por estas puertas para adorar a Jehová” (Jer. 7:2).

Los de Israel que se creían leales a Dios por ir al templo para adorar estaban confiando en el templo para protegerles de la invasión extranjera. El templo había llegado a ser su dios. “No fiéis en palabras de mentira, diciendo: Templo de Jehová, templo de Jehová, templo
de Jehová es este” (v. 4). Fue su refrán. Creían que, mientras el templo permaneciera, Dios estaría con ellos (pues su presencia estaba allí), y los libraría de la amenaza de Babilonia. No tenían una relación personal con Dios; sólo iban al templo. La presencia de Dios abandonó el templo antes de la invasión babilónica y con ella el templo fue destruido. El templo sin Dios no es nada, sólo un edificio.

¿Como sabemos que aquellos no conocían a Dios? Por sus vidas. Eran injustos en su trato con sus vecinos (v. 5). Oprimían a los extranjeros, los huérfanos y las viudas, derramaban sangre inocente y servían a los ídolos (v. 6). Estaban hurtando, matando, adulterando, jurando en falso y quemando incienso a Baal (v. 9). Sin embargo, se creían seguros porque tenían el templo. Confundían el símbolo con la realidad.

Nuestro país está lleno de evangélicos que piensan que su religión les va a salvar como la gente de Judá pensaban que el templo les salvaría. Los judíos en el día de Jesús tenían aquella misma adoración al templo. Cuando Jesús dijo que lo iba a destruir y reedificar, ¡intentaban matarle!

¿Cómo puede uno saber si está confiando en Dios o en su religión evangélica? Por sus vidas. Nada más escribir estas líneas, sonó el teléfono y una señora me contó de otra mujer de su iglesia que es una artista del engaño. Trama cosas maquiavélicas para llevar a cabo su agenda de promoción personal. Tienes que ser o bien un Sherlock Holmes o el Espíritu Santo para descubrir sus mentiras y engaños. Es encantadora, pero esconde un corazón torcido. ¿Qué dice Jesús acerca de personas así? (Ap. 21:8.)

No es nuestra doctrina evangélica la que nos salva, ni la asistencia a la iglesia, sino Jesús; y si realmente nos ha salvado seremos honestos, caritativos, misericordiosos, compasivos y generosos en nuestro trato con otros. Por nuestros frutos se verá que hemos sido injertados en el Árbol de la Vida. Toda nuestra confianza estará en el Dios que no habita templos de fabricación humana.

Por Ptor David Burt

Vengan

Vengan celebremos cada día a Dios todopoderoso, aún en medio de las lágrimas de hoy, pues luego seran de alegría. Vengan:

  • Aclamemos
  • Estemos alegres
  • Cantemos
  • Demos alabanzas
  • Adoremos
  • Postrémonos
  • Arrodillémosnos
Sugerimos leer Salmos 95.1.2 Venid, aclamemos alegremente a Jehová; cantemos con
júbilo a la roca de nuestra salvación. Lleguemos ante su presencia con alabanza; aclamémosle con cánticos.

Salmos 95.6 Venid, adoremos y postrémonos; arrodillémonos delante de Jehová nuestro Hacedor.

viernes, 14 de marzo de 2014

El Poder motivador de la Gracia

El poder motivador de la gracia

Leer | ROMANOS 6.1-4


Algunos cristianos tienen dificultades con la doctrina de la gracia, porque piensan que es una licencia para pecar. Parece demasiado fácil creer en Jesús y luego hacer lo que uno quiera. Pero, ¿no tienen todavía los creyentes que vivir de cierta manera para poder agradar al Señor? El problema con este razonamiento es que mezcla el legalismo con la gracia, al decir: “Claro, somos salvos por gracia, pero después de la salvación, hay que obedecer las reglas para mantenerse en el favor de Dios”. Esa forma de pensar elimina la esencia de la gracia y corrompe el mensaje de esperanza.

Lo que necesitamos comprender es que la gracia es mejor motivación que la ley. Cuando usted tiene que comportarse bien para agradar al Señor, la culpa se convierte en su compañera constante, ya que nunca podrá ser lo suficientemente bueno. Cada vez que deje de estar a la altura de sus propias expectativas, podrá poner en duda que Dios le ama, o incluso preguntarse si realmente es salvo. Dios no quiere que vivamos cautivos de nuestras obras. Ya hemos recibido su aceptación, y no hay nada más que podamos añadir.

La gracia no solo nos libera de la culpa, sino que también nos motiva a obedecer y a servir al Señor con amor y gratitud por todo lo que Él ha hecho por nosotros.

¿Está usted afanado haciendo cosas para agradar a Dios? Si es así, probablemente esté agotado. Cuando comience a vivir en su gracia, se sentirá vigorizado porque la obediencia y el servicio serán el resultado natural del amor de Dios. En vez de un sentimiento de culpa, usted tendrá gozo y gratitud.

Por Min En Contacto

Anunciaré

Una vez más nos ponemos de acuerdo con la Palabra de Dios y su quehacer en nosotros; Y estás invitado que junto a nosotros a que expreses también anunciaré! ¿Y que será?
Anunciaremos por siempre Su misericordia y fidelidad, amén.

Salmos 92.2 Anunciar por la mañana su misericordia, y tu fidelidad cada noche

jueves, 13 de marzo de 2014

Hijos Sanguijuelas

Hijos Sangüijuelas

“Hijos obedeced en el Señor a vuestros padres, porque esto es justo. Honra a tu padre y a tu madre” (Ef. 6:1, 2).

Hoy día tenemos con cada vez más frecuencia el fenómeno de hijos mayores que parecen sanguijuelas. No trabajan, ni estudian, viven a cuenta de los padres, y se aprovechan de ellos. En algunos casos, ni los tratan con respeto. Se retiran a sus habitaciones, cierren la puerta, y pasan el tiempo escuchando música o en el internet. La madre se convierta en su esclava de amor, cocinando para ellos, lavándoles la ropa, planchando, derramando su amor en sacrificio por ellos, y ellos cada vez más egoístas y encerrados en su mundo.

¿Qué dicen las Escrituras? Ya hemos citado lo que Dios pide de los hijos. La sección siguiente, Ef. 6:5-9, habla de los esclavos y amos, pero de ninguna manera se refiere a la relación entre padres e hijos: “Sirviendo de buena voluntad, cómo al Señor y no a los hombres”. ¡Parece que esto es lo que la madre está haciendo!  No puede ser. Mira el contexto: “Siervos, obedeced a vuestros amos terrenales con temor y temblor, con sencillez de vuestro corazón, como a Cristo.” Los hijos mandan y los padres les obedecen para ganar su amor. Los roles están trastocados. Los padres tienen temor a perderles. Ya son ancianos, se desgastan y los hijos están cada vez más egoístas. No es el plan de Dios que la madre pierda la salud para corromper a sus hijos. El plan de Dios es que los padres críen a sus hijos en la formación y instrucción del Señor: “Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor” (v. 4). Dices que esto es para hijos pequeños. ¡Pues, éstos están actuando como si lo fuesen! ¡Este es el camino a la madurez!

¿Qué pasa si los hijos mayores no quieren la disciplina y la amonestación? ¿Qué hacemos si no lo admiten? Los padres cristianos tienen que decidir si van a obedecer a los hijos o al Señor. Servir a Dios y servir las demandas de los hijos no es compatible. Los padres son del Señor. Este es un hogar cristiano. Si no pueden seguir las instrucciones de Dios, esta relación no es viable. Vamos a seguir formándoles como Dios nos ha mandado. Si el hijo no lo quiere, se buscará otro sitio donde vivir. Lo que no vamos a hacer es servir sus intereses y hacerle cada vez más un hijo del diablo. No estamos para formar hijos para del diablo, sino para el Señor. El amor servil no puede salvarle, pero la disciplina del Señor, sí. Obedecemos al Señor y no a nuestro hijo, y dejamos el resultado en manos de aquel que lo ama más que nosotros.

Por Ptor. David Burt

Déjale saber a Dios

Dios conoce aún la palabra antes que salga de nuestra boca, pero es Dios de pacto, de relación personal, de comunión íntima, desea que tengamos la confianza y nos sintamos en la libertad de allegarnos a su presencia en alabanza, adoración y sinceridad de corazón. Demostrarle que es nuestro Dios.

Déjale saber a Dios que confías en Él.
Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo mío; mi Dios, en quien confiaré. Salmos 91.2

miércoles, 12 de marzo de 2014

Peticiones de oración



Como parte de las peticiones de oración para hoy tenemos:


  • Orar por la conversión de incrédulos, ateos, indecisos y en doctrina de error
  • Orar por firmeza, perseverancia, testimonio de los creyentes en todo el mundo
  • Incluír lugar para hoy en el Calendario de Pasaporte Misionero
  • Orar por nuestro sometimiento a Dios en sus propósitos y voluntad
  • Podamos servir y edificar a hermanos de la fe también a personas o entidades nos permiten compartir
  • Almas convertidas y sirviendo a Dios durante el año

Alabando y Glorificando

En toda la Biblia podemos leer expresiones que exaltan la grandeza de Dios, podemos aprender lenguaje hermoso y propicio para dedicar a Dios en nuestro tiempo a solas o acompañados.
 Yo no imagino otra manera de acercarme a Él, que no sea alabando y glorificando su persona y nombre primeramente.

Me gusta como lo expresó el escritor en el Salmo 86.12-13 Te alabaré, oh Jehová Dios mío, con todo mi corazón, y glorificaré tu nombre para siempre. Porque tu misericordia es grande para conmigo. Y has librado mi alma de las profundidades del Seol.

martes, 11 de marzo de 2014

A trabajar!

Dios a obrado en nuestras vidas de manera especial y es sorprendente que nos haga participantes de su obra en favor del prójimo. El espera que en su amor, con Su Palabra y
en su poder podamos marcar la diferencia, así fue en el pasado, así en nuestros días y así espera de cada generación.  Esto en palabras nos dice:  A trabajar!  

Parte de lo que debemos hacer es:

  • Defender al débil
  • Defender al huérfano
  • Justicia al afligido
  • Justicia al menesteroso
  • Librar al afligido y necesitado de manos de impíos
Lo consigues para leer en la Biblia Salmos 82.3-4

lunes, 10 de marzo de 2014

Brillante contestación

BRILLANTE CONTESTACIÓN

“Entonces Pedro, lleno el Espíritu Santo, les dijo: Gobernantes del pueblo y ancianos de Israel: puesto que hoy se nos interroga acerca del beneficio hecho a un hombre enfermo, de qué manera éste haya sido sanado, sea notorio a todos vosotros, y a todo el pueblo de Israel, que en el nombre de Jesucristo de Nazaret, a quien vosotros crucificasteis y a quien Dios levantó de los muertos, por él este hombre está en vuestra presencia sano” (Hechos 4:8-10).

Pedro, en un poderoso discurso, demuestra a los gobernantes del pueblo y a los ancianos de Israel que están haciendo el ridículo, llevando a juicio a un hombre por haber hecho un bien a un minusválido al que ellos desprecian de todas formas. En efecto les dice: “Aquí estamos siendo juzgados por una obra de caridad. ¿Por qué estáis perdiendo el tiempo juzgando una buena obra hecha a una persona que, según vuestra estimación, es insignificante?”  Les confronta con denuedo. Les presenta la verdad tan bien razonada que les deja sin respuesta. De repente, ¡son los acusadores los que están puestos a prueba!  Brillante defensa de parte de Pedro. Después, les acusa con denuedo de haber matado al Mesías, a Jesucristo de Nazaret. La evidencia principal de que Él es el Mesías consiste en que Dios le levantó de los muertos, y la evidencia de que está vivo es que ha sanado al cojo que tienen delante de sus propios ojos. El milagro hecho a este hombre demuestra que el Jesús resucitado tiene poder para sanar. Es evidencia innegable que demuestra su culpabilidad al matar al Salvador enviado por el Dios al que ellos profesan servir.

Es sorprendente cómo el poder de Dios puede caer sobre hombres sin estudios para que puedan contestar con autoridad, poder y asombrosa sabiduría a las autoridades del país y, a la vez, presentar el evangelio de forma contundente que les deja a todos culpables delante de Dios: “Entonces viendo el denuedo de Pedro y Juan, y sabiendo que eran hombres sin letras y del vulgo, se maravillaban; y les reconocían que habían estado con Jesús. Y viendo el hombre que había sido sanado, que estaba en pie delante de ellos, no podían decir nada en contra” (Hechos 4:13-14).

Este es el poder de Dios obrando en y por medio de nosotros, personas normales y corrientes como tú y yo, al colocarnos en situaciones donde estamos puestos a prueba, para convertirlas en maravillosas oportunidades para predicar el evangelio con incuestionable autoridad.

Por Ptor. David Burt

Restaurados


Restaurados, cuando escuchamos esta palabra debemos pensar que significa, lo que incluye, entre las cuales encontramos:  

  • Arreglar  
  • reparar los daños sufridos  
  • Volver a poner en el estado que antes tenía, es decir restituir. 
Dios nos hizo perfectos y eternos, luego con el pecado se hizo necesario ser restaurados esto posible gracias a la obra extraordinaria y perfecta de su Hijo Jesucristo.  Mientras estamos en el proceso de nueva criatura y llegar a la estatura de Cristo, siempre necesitamos de las manos expertas del Hacedor para que nos arregle en el camino, es decir, corrija, repare nuestros pensamientos y corazón de las aflicciones y sufrimientos de la vida, y finalmente nos restituye en santidad, con perfección cuando seamos igual a Cristo.

Dígamos cada día:  Oh Dios, restaúranos; haz resplandecer tu rostro, y seremos salvos. Salmos 80.3

viernes, 7 de marzo de 2014

Los requisitos del servicio

Los requisitos del servicio

Leer | LUCAS 19.1-9

Cuando el Señor Jesús dejó el cielo, no vino a la tierra para ser una superestrella; vino a servir. Como sus discípulos, estamos en este mundo para seguir su ejemplo de servicio a los que sufren. La historia de Zaqueo nos muestra algunas cualidades espirituales que necesitamos desarrollar para servir como lo hizo el Señor.
Percepción: Aunque estaba rodeado por una multitud, Jesús se fijó en un hombre encaramado en un árbol. Zaqueo era odiado y rechazado porque era recaudador de impuestos. Aunque era rico, algo faltaba en su vida, y Cristo reconoció su necesidad. Hay personas que nos rodean “encaramadas en árboles” --vacías, con necesidades y desesperadas. Pero muchas veces estamos tan preocupados por nuestras actividades, que no las notamos.
Disponibilidad: Jesús se dirigía a Jerusalén para llevar a cabo el acto más importante en la historia de la humanidad: la redención. Sin embargo, se detuvo a comer con un hombre necesitado espiritualmente. ¿Qué podría ser tan importante que le impida a usted dar a otros lo que más necesitan --su tiempo?
Aceptación: Aunque Zaqueo era un notorio pecador, Jesús no le dijo: “Corrige tu conducta, y después vendré a tu casa”. Estamos llamados, no a corregir a la gente, sino a compartir el evangelio transformador de Cristo.
¿Qué tal le está yendo en su servicio a las personas? Tal vez sea el momento de que abra sus ojos espirituales para ver a las personas necesitadas que le rodean. Dios pone oportunidades a nuestro alrededor, pero si no estamos atentos las desaprovecharemos.

Por Min En Contacto

Confiar, recordar y cumplir

A mayor o menor escala todos experimentamos estas simples pero muy significativas palabras.  Por regla general cuando pequeños dependíamos de cuido, se desarrollaba un vínculo de confianza.  Nuestro cerebro almacena información antigüa, pasada y reciente lo que nos hace mantener la agilidad mental y poder recordar. Durante el desarrollo en la vida se nos enseña, modela, exige lo que es el cumplir, con un horario, respeto, obediencia, reglas y así vamos creciendo, lo que nos acompaña toda la vida, cumplir las asignaturas, cumplir las leyes, cumplir a nivel laboral etcétera. 

Cabe destacar que por medio de las Sagradas Escrituras encontramos que Dios también énfatiza al respeto, pues trata el asunto, para con Él, uno mismo, la familia y sociedad. Dios creó al ser humano, siempre a dado el paso de acercarse y que tengamos comunión y reverencia para con Él, lo cual a su vez redunda en bienestar para nosotros en cada área de nuestras vidas.

Sigamos el consejo bíblico Salmos 78.7-8 A fin de que pongan en Dios su confianza, y no se olviden de las obras de Dios; que guarden sus mandamientos, y no sean como sus padres, generación contumaz y rebelde; Generación que no dispuso su corazón, ni fue fiel para con Dios su espíritu.

Ejercitemos día a día confiar, recordar y cumplir para con Dios y sus mandamientos.


jueves, 6 de marzo de 2014

En medio de la tormenta

 EN MEDIO DE LA TORMENTA

 “Y ya la barca estaba en medio del mar, azotada por las olas; porque el
 viento era contrario. Mas a la cuarta vigilia de la noche, Jesús vino a ellos
  andando sobre el mar. Y los discípulos, viéndole andar sobre el mar, se
 turbaron, diciendo: ¡Un fantasma! Y dieron voces de miedo. Pero en seguida
 Jesús les habló, diciendo: ¡Tened ánimo; yo soy, no temáis!” (Mateo
 14:24-27).

 Los discípulos estaban tan agobiados y tan abrumados repentinamente, que la
sola idea de que Jesús estaba cerca cuidando de ellos era absurda.
Probablemente uno dijo: “Esta es la obra de Satanás. El diablo salió a
 matarnos, por todos los milagros de los que hemos formado parte.” Otro dijo:
 “¿Dónde nos equivocamos? ¿Quién de nosotros tiene pecado en su vida?
 ¡Dios está enojado con alguien en esta barca!” Otro podría haber
 preguntado: “¿Por qué nosotros? Estamos haciendo lo que Él dijo que
 hagamos. Estamos siendo obedientes. ¿Por qué esta tormenta repentina?”

Y en la hora más oscura “Jesús vino a ellos.” ¡Qué difícil debe haber 
 sido para Jesús esperar en el borde de la tormenta, amándolos tanto,
 sintiendo cada dolor que sentían, queriendo tanto evitar su sufrimiento, 
 anhelando hacer algo como un padre por sus hijos en problemas. Sin embargo, él 
 sabía que nunca lo podrían conocer completamente o confiar en Él hasta que 
 toda la furia de la tormenta cayera sobre ellos. El se revelaría solamente
 cuando ellos hubiesen llegado al límite de su fe. La barca no se habría
 hundido, pero su miedo los habría ahogado más rápido que las olas golpeando 
 la embarcación. El temor de ahogarse era por la desesperación, no por el
 agua!

 “Y los discípulos, viéndole…se turbaron, diciendo: ¡Un fantasma!”
(Mateo 14:26).

 Ellos no reconocieron a Jesús en esa tormenta, vieron un fantasma: una 
aparición. La idea de Jesús estando tan cerca, siendo participante de todo 
 aquello que estaban pasando, ni siquiera entraba en sus mentes.

 El peligro que todos enfrentamos es no ser capaces de ver a Jesús en nuestros 
 problemas. En lugar de eso, vemos fantasmas. En el mismísimo momento en que el 
 temor alcanza su punto más alto, cuando la noche es más negra, la tormenta es 
 más furiosa, los vientos son más fuertes y la desesperanza es abrumadora, 
Jesús siempre se acerca a nosotros para revelarse como el Señor de la 
 inundación: el Salvador en las tormentas.

 “Jehová preside en el diluvio, Y se sienta Jehová como rey para siempre”
 (Salmo 29:10) 

Por  David Wilkerson

Gracias damos



Todos los días contamos con las misericordias de Dios, su favor, bendición, ayuda, Palabra y en fin nos colma de bienes y favores, que en cada devocional diario Dios escuche de nosotros no solo peticiones y necesidades, también alabanzas repletas de gracias por lo bueno, maravilloso y soberano que Es, su amor, fidelidad y su obra en nuestras vidas.

Salmos 75.1 Gracias te damos, oh Dios, gracias te damos, pues cercano está tu nombre; Los hombres cuentan tus maravillas.

miércoles, 5 de marzo de 2014

Peticiones de oración

5 de marzo de 2014

Hoy orando especialmente por:  

  • Fortaleza, firmeza, temor a Jehová, obediencia, servicio, testimonio y perseverancia en fe para la nueva generación de creyentes
  • Fortaleza, firmeza, valor, testimonio y perseverancia para los hermanos perseguidos a causa de su fe
  • Incluír oración por lugar que corresponde en el Calendario provisto bajo Pasaporte Misionero
  • Por todo lo relacionado al Ministerio y sus íntegrantes

Un pedido

Leí hoy esta hermosa aseveración bíblica que comparto contigo como parte del devocional que podemos hacer en oración como un pedido:

Salmos 72.19 Bendito su nombre glorioso para siempre, y toda la tierra sea llena de su gloria. Amén y Amén.

Es la voluntad de Dios que todos escuchen sobre su persona y mensaje, su Palabra actúa en las personas haciendo que se manifieste Gloria de Dios para sus vidas y puedan ser ministradas, puedan ser transformadas, puedan ser salvas.


martes, 4 de marzo de 2014

Te quiero ver


Ahnelo por buscar a Dios
por obedecer a Dios
por servir a Dios
Ahnelo de darle alabanza, honor y adoración siempre



Dios mi refugio


No temeré, Dios es escudo alrededor de mí
Mi refugio, escudo y fuerza que me sostiene
Mi esperanza y respuesta; en quien confío


Aún en la vejez

Dios es eterno, su Palabra contiene y habla sobre su eternidad, aceptando a su Hijo Jesucristo elegimos dónde pasar la eternidad. Aún en la vejez podemos seguir haciendo notorio el nombre de nuestro Dios, pues la eternidad es para siempre, así que comparando nuestros días terrenales son pasajeros y breves, aprovechemos bien el tiempo.

Salmos 71.18 Aun en la vejez, y las canas, oh Dios, no me desampares, hasta que anuncie tu poder a la posteridad, y tu potencia a todos los que han de venir, y tu justicia, oh Dios, hasta lo excelso.

lunes, 3 de marzo de 2014

Consagración Marzo

Biblia, oración y ayuno, invitado a consagración días miércoles 5, 12, 19, 26 de marzo .  Puedes hacernos llegar tus peticiones de oración para que otros hermanos e intercesores nos unamos en clamor, usando la forma de peticiones en el portal ministerial o directo al email. Dios nos bendice.


Si estás menesteroso y afligido




Clama a Dios. La Palabra de Dios está repleta de pasajes bíblicos que traen esperanza, que ániman, que suplen necesidades, que son inspiradoras, dan nuevas fuerzas y encaminan a mejoría. Lo importante está en creerle a Dios y a su Palabra y actuar en obedeciencia. 

Notemos como lo presenta Salmos 72.12 Porque él librará al menesteroso que clamare, y al afligido que no tuviere quien le socorra.

El Barómetro

EL BARÓMETRO



"Un hombre que vivía en Long Island, Nueva York, compró un barómetro (un instrumento para medir la presión) de alta calidad. Cuando se lo entregaron en su casa, la aguja parecía dañada, señalando a la sección marcada "Huracán".

Según el conocido maestro bíblico E. Schuyler English, que narró esta historia, este hombre agitó el barómetro pero el indicador se mantuvo igual. Entonces el hombre se sentó y escribió una airada carta a la tienda donde la había comprado. Al día siguiente dirigiéndose a su oficina en la ciudad de Nueva York, puso la carta en el correo. Durante aquel día, un huracán azotó la costa este. Aquella tarde el hombre volvió a su casa para descubrir que había perdido el barómetro... y su casa.

El escepticismo o la falta de fe en nuestra generación es uno de los mayores peligros de los que la humanidad tiene que vencer. Los hombres tienen que aprender a creer y confiar en lo que Dios le ha dicho. Sino, seremos como el hombre que teniendo la verdad en su mano, no le hizo caso y perdió todo lo que poseía.

Aunque difícil de entender, la fe sobrepasa todo concepto humano en complejidad, dificultad y sencillez. Cuando John Patton estaba traduciendo la Biblia al idioma de los isleños de la Nuevas Hébridas, le parecía imposible encontrar una frase en ese idioma que diera a entender qué es la fe.

Un día el anciano jefe de la aldea vino a visitarlo mientras trabajaba en la construcción de su casa. Cuando el jefe se paró sobre el piso sin terminar con la plena seguridad que el piso lo podría sostener, Patton captó la idea que buscaba. Le pidió al jefe que expresara en su idioma su confianza de que el piso lo podía sostener. "Suficientemente fuerte para que yo pueda depositar todo mi peso sobre él" fue lo que dijo en anciano. De manera que Patton pudo llevar este supremo concepto a este pueblo, fe: "depositar todo el peso del cuerpo sobre algo".

El Cielo extiende esta invitación a todos sus hijos sin importar condición alguna, depositemos nuestra vida en el Señor porque El nos sostendrá y cuando venga el huracán, permaneceremos de pie."





Dominio público

Días Malos


Incluso el apóstol Pablo tuvo días malos


 Pablo fue azotado con un día malo mientras viajaba por Macedonia. “Cuando

 vinimos a Macedonia, ningún reposo tuvo nuestro cuerpo, sino que en todo

 fuimos atribulados; de fuera, conflictos; de dentro, temores” (2 Corintios

 7:5). Este hombre piadoso confesó que su hombre interior estaba plagado no

 solo por un temor, ¡sino qué por muchos temores!


 Ciertamente, Pablo no era un súper humano. Él estaba sujeto a las mismas

 emociones humanas que nosotros enfrentamos. En una ocasión, todos los

 creyentes de Asia se habían vuelto en su contra, aquellos por los cuales él

 había dado su vida. Él escribió: “…aunque amándoos más, sea amado

 menos” (2 Corintios 12:15).


 Sí, Pablo tuvo días terribles. Pero nunca cedió a las emociones y

 tentaciones que les acompañaban. Él testificó en su peor momento: “lleno

 estoy de consolación; sobreabundo de gozo en todas nuestras tribulaciones.”

 (2 Corintios 7:4). Entonces añadió: “Pero Dios, que consuela a los

 humildes, nos consoló…” (verso 6).


 ¿Estás pasando por un mal día, una mala

semana, un largo período de

 desaliento? ¿Estás decaído, desanimado, con

pensamientos de abandonarlo

 todo? Si esto te describe, entonces, ¿cómo

crees que Dios reacciona a tu

 prueba? ¿Acaso te reprende o te castiga? ¡No, nunca! Pablo declara: “El

 Señor nunca ha estado más cerca de ti, y más dispuesto a ayudarte que cuando

 estas decaído y herido”.



 “Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de

 misericordias y Dios de toda consolación, el cual nos consuela en todas

 nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que

 están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros

 somos consolados por Dios.” (2 Corintios 1:3-4). La palabra griega para

 “consolación” aquí significa “confortar o alentar, llamar cerca.”

 ¡Qué maravillosa verdad! Cuándo experimentamos días malos, nuestro Padre

 celestial saca provecho de ellos para acercarnos más a Él.


Por:  David Wilkerson

sábado, 1 de marzo de 2014

Felicidades en Marzo

Muchas felicidades a todos los cumpleañeros en el mes de marzo, que pasen un día hermoso, lleno de alegría, sorpresas, y amor, sobre todo en la paz y bendición del Señor que les permite contarlos y celebrarlos. Felicidades!