jueves, 31 de agosto de 2023




 

La expresión de la fe

 Marcos 11.20-24


Si usted le pidió algo a Dios y nunca recibió lo que deseaba, es comprensible que pueda preguntarse si Dios le escuchó en realidad. ¿Recuerda haber pensando alguna vez: ¿Qué pasó, Señor? Dijiste que si te pedía con fe, lo harías. ¿No me escuchaste?


Deténgase para pensar en esta pregunta: ¿Puede recordar alguna ocasión en que trajo una petición al Señor y al parecer no fue contestada? ¿Cuál fue la situación? ¿Qué pidió en su oración? ¿Qué dijo a otros en cuanto a esa oración? ¿Que hizo al respecto?


Creo que una de las razones más comunes por las que experimentamos una crisis de fe es que nuestras palabras y nuestra actitud no armonizan. Nos decimos que estamos orando al Padre celestial, buscando su voluntad y pidiendo su intervención, pero lo que realmente estamos haciendo es quejándonos a Él.


Le decimos: “Señor, realmente metí la pata”, o “No merezco esto”. Podemos decirle, también: “¿Cómo sucedió esto?” O, quizás, incluso, clamar: “¿Por qué permitiste que esto sucediera?”. Nos lamentamos llenos de angustia por la situación, y después le pedimos a Dios que la arregle. ¿Es esta una oración que honra a Dios?


En Marcos 11.24 Jesús enseña que si pedimos algo, debemos creer en nuestro corazón que ya ha sido concedido. Este nivel de fe no se encuentra en nuestros lamentos sino en nuestras alabanzas. Dios quiere que clamemos a Él y que traigamos nuestras peticiones a sus pies (1 P 5.7). Pero debemos hacerlo de una manera que se centre en la gloria de Dios, no en la nuestra.


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miércoles, 30 de agosto de 2023




 

Introducción al tercer trimestre

 No te pierdas la introducción y los títulos de los próximos estudios bíblicos dominicales relacionados con:  Enseñanzas de las parábolas para hoy.  Te dejo el enlace para tí y que lo compartas, visita

https://www.ministeriotv.com/video/introduccin-tercer-trimestre-26331


Confianza en la oración

 1 Juan 5.14, 15


A lo largo de toda la Biblia, somos desafiados a orar. En el Sermón del monte, Jesús dice a sus discípulos que sigan pidiendo, buscando y llamando con la confianza de que el Padre celestial dará cosas buenas a sus hijos (Mt 7.7-11). Y en Filipenses 4.6, Pablo nos exhorta a orar sin cesar. Por tanto, es obvio que Dios quiere que vengamos a Él con todas nuestras necesidades y preocupaciones.


El pasaje de hoy nos asegura que el Señor escucha y responde nuestras oraciones. Pero esta promesa es acompañada por una condición: debemos pedir de acuerdo con la voluntad de Él. Sin embargo, ¿cómo podemos saber si nuestra petición es lo que Él desea? Gran parte de la voluntad de Dios está indicada claramente en la Biblia.


Aunque nos gustaría estar seguros de que el Señor escuchará y responderá, a veces nuestras oraciones parecen disparos a ciegas, porque no tenemos idea de si armonizan con su voluntad. Si nos atrevemos a reconocerlo, también hay momentos en los que solo queremos que Dios haga lo que le pedimos, sin reparar en lo que Él desea.


Si queremos orar de manera eficaz, nuestra meta no debe ser ofrecer oraciones rápidas, irreflexivas o egoístas con la esperanza de recibir respuestas rápidas. Por el contrario, debemos aprender a orar con sabiduría y paciencia. Además de expresar nuestras preocupaciones y peticiones a Dios, debemos ofrecernos a nuestro Padre, como lo hizo Jesús en Getsemaní (Mt 26.39). Cuando nos rendimos al Señor y somos obedientes a Él, su Espíritu nos guía y nos da la sabiduría que necesitamos para orar de acuerdo con su voluntad.


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martes, 29 de agosto de 2023




 

Dios revelado al hombre

 Ya puedes escuchar el tema nuevo disponible en el Canal, lo consigues siguiendo el enlace a continuación

https://www.ministeriotv.com/video/dios-revelado-al-hombre-26329


Una invitación especial

 Leer | Génesis 12.1-8


Dios, el Creador del universo, nos elige. Y lo hace, no solo para salvarnos de la eternidad en el infierno. Su amor va más allá de eso. Él quiere tener una relación estrecha con nosotros. Lo cual requiere:


Compromiso. Dios prometió que haría de Abraham una nación grande. Le pidió al futuro patriarca que le demostrara su acatamiento obedeciendo la orden de dejar su tierra para ir a una tierra desconocida. El compromiso del Señor para con nosotros es claro. Nos rescató del pecado por medio de su Hijo Jesús, envió el Espíritu Santo para morar en nosotros, y nos prometió vida eterna. Nuestro compromiso es la obediencia, tanto en actitud interior como en acciones exteriores.


Comunicación clara. Para desarrollar una relación cercana, dos personas se expresarán pensamientos y sentimientos profundos, y se escucharán mutuamente con atención. Dios nos habla de sí y de sus planes por medio de las Sagradas Escrituras, y Él también está dispuesto a escuchar (Sal 10.17). El tiempo que pasamos orando y meditando en su Palabra revela nuestro compromiso con la comunicación, que incluye escuchar, hablar y entender.


Franqueza. Dios nos habla sinceramente de lo que somos, de la condición del mundo, y de la única solución: Jesucristo. Nos dice claramente las verdades difíciles sobre nosotros, pero también nos alienta y nos ayuda en nuestros esfuerzos por obedecerle. Nuestra parte consiste en ser francos con Él en cuanto a nuestros pensamientos, acciones y emociones.


La salvación es apenas el primer paso de la vida en Cristo (Jn 3.16). ¿Ha aceptado usted la invitación de relacionarse con Dios?


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lunes, 28 de agosto de 2023




 

Escogidos para alabanza de su Gloria

 Ya puedes acceder al tema de estudio y compartirlo siguiendo el vínculo hacia el Canal a continuación

https://www.ministeriotv.com/video/escogidos-para-alabanza-de-su-gloria-26326


Cristo Jesús revela a Dios

 Imperdible tema que puedes escuchar visitando el Canal al seguir el enlace provisto a continuación

https://www.ministeriotv.com/video/cristo-jess-revela-a-dios-26327


Salvación y Señorío

 Colosenses 2.6-10


¿Cómo pueden las personas que han puesto su fe en Cristo como su Salvador vivir en rebeldía contra Dios, con actitudes y conductas impropias? En realidad, cuando una persona es salva recibe una vida nueva; la conducta y los pensamientos pecaminosos son característicos de la vieja vida. Sin embargo, los viejos patrones persisten. La verdad es que todos los creyentes viven con este dilema en mayor o menor grado.


La salvación es un acto que Dios lleva a cabo una sola vez en la vida de cualquier persona que reconoce que Cristo pagó sus pecados. Esa persona tiene, entonces, la seguridad de un lugar en el cielo. Pero, ¿sabía usted que el Señor quiere más que esto para nosotros? La Biblia enseña que Él nos predestinó para ser “hechos conformes a la imagen de su Hijo” (Ro 8.29, 30). Este es su objetivo fundamental. La salvación es la puerta que abre el camino a este proceso, que se logra por el Espíritu Santo que vive en nosotros.


Esta transformación requiere el sometimiento al señorío de Cristo. Él pagó por nosotros con su sangre, y como ahora le pertenecemos, el Señor tiene el derecho a gobernar nuestra vida. En otras palabras, le recibimos como Señor en el momento de la salvación, y ahora debemos andar en Él (Col 2.6), dejando que tenga el control de cada decisión, acción, palabra, motivo, actitud y pensamiento.


Si ve poco progreso en su vida espiritual, es posible que el problema se deba a que no le ha entregado cada aspecto de su vida al Señor. Solo al rendirse a Él y al permitirle que gobierne su vida será bendecido ricamente, y su carácter, perspectiva, actitudes y conducta cambiarán.


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viernes, 25 de agosto de 2023




 

Quiénes son los perdidos

 Lucas 19.1-10


Zaqueo trabajaba como jefe de los recaudadores de impuestos para el gobierno romano, y por su profesión era despreciado por sus coterráneos judíos. Cuando Jesús lo descubrió y le pidió visitar su casa, la multitud quedó consternada: el Señor se estaba relacionando con alguien cuya conducta le hacía pecador a los ojos de ellos. El Salvador respondió: “Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido” (Lc 19.10).


La palabra perdido es un término bíblico que se utiliza para describir la situación espiritual de toda persona que todavía no ha recibido a Jesucristo como Salvador personal. En ese estado, una persona está separada de Dios: hay vida física, pero no conexión espiritual con el Padre celestial. Perdido no tiene nada que ver con la ubicación física; se refiere a falta de vida espiritual (Ef 2.1), cuando la mente está ciega a la verdad de Dios.


La humanidad se convirtió en pecadora por la acción desobediente del primer ser humano: Adán. Cuando él apoyó el plan de Eva y desobedeció a Dios, su naturaleza se volvió rebelde, y todas las generaciones a partir de entonces han heredado sus tendencias carnales pecaminosas. Toda persona nace en este mundo con una naturaleza que no busca a Dios (Ro 5.12).


Zaqueo era pecador por su condición perdida, no por su codiciosa profesión. La buena conducta no nos hace cristianos, ni la mala nos descalifica. El recaudador de impuestos recibió la salvación por su fe en Jesús. 


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jueves, 24 de agosto de 2023




 

El proceso de nuestra fe

 Santiago 2.14-17


Expresamos fe todos los días, en toda clase de situaciones. Creemos que llegaremos al trabajo a salvo, o nunca nos meteríamos en el auto. Creemos que nuestro amor durará toda la vida, o nunca nos casaríamos. Creemos que nuestra silla favorita soportará nuestro peso, o nunca nos sentaríamos en ella. La fe fluye de nosotros todo el tiempo, incluso cuando no tiene nada que ver con Dios.


Pero hay un proceso que moldea nuestra fe —una progresión que convierte el asomo de fe en una acción medible. Primero, comienza en la mente. Pensamos en el asunto, lo mantenemos en la mente y visualizamos no solo la necesidad sino también la solución.


Segundo, comenzamos a hablar del asunto con otras personas y con el Señor. Hablar sobre el asunto con alguien en quien confiamos es una manera para entender mejor lo que está sucediendo, reunir nuevas ideas y procesar la información.


Luego, después de hablar del asunto, tenemos una idea mejor de lo que está involucrado. Esto nos lleva al tercer paso, en el que emprendemos la acción. Debemos hacer algo. Si la fe no produce un resultado medible, entonces algo estuvo mal, y necesitamos buscar la ayuda de Dios. La fe que nunca va más allá de la mente o de la conversación no logra nada. Pero cuando el proceso de creación de fe da lugar a la acción, no importa qué tan sencilla sea esta acción, comenzamos realmente a ver el poder del Señor.


¿Está usted luchando con un problema de fe? Pida a Dios sinceramente que le muestre si se ha atascado en alguna parte del proceso.


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miércoles, 23 de agosto de 2023




 

Dios y sus grandezas

 Ya puedes acceder al nuevo tema Dios y sus grandezas, visita el enlace hacia el Canal a continuación

https://www.ministeriotv.com/video/dios-y-sus-grandezas-26317

La oración por la Iglesia

 Colosenses 1.1-12


Hoy nos encontramos con Epafras, un hombre que tenía un corazón que amaba a la iglesia local. Probablemente se convirtió a Cristo bajo la enseñanza de Pablo cuando el evangelio se extendía rápidamente por Asia Menor. Epafras evangelizó su ciudad natal de Colosas y fundó allí una iglesia; y posiblemente también iglesias en Hierápolis y Laodicea.


Aunque se dice muy poco sobre Epafras en el Nuevo Testamento, la carta a los Colosenses pone de relieve su gran amor y su profunda preocupación por la iglesia de Cristo (Colosenses 4.12, 13). Al final de la carta, Pablo dice que Epafras está “siempre rogando encarecidamente por vosotros en sus oraciones, para que estéis firmes, perfectos y completos en todo lo que Dios quiere” (Colosenses 4.12).


Lo que Epafras pedía no era un número mayor de miembros, ni tampoco una ofrenda más grande, sino madurez espiritual y conocimiento verdadero de la voluntad de Dios. En ese momento, Epafras estaba en la cárcel con Pablo (Fil 1.23) sin poder refutar a los falsos maestros que se habían infiltrado en la iglesia en Colosas. Pero, estar separado de su congregación no significaba que estaba en una condición de impotencia. La intercesión es un ministerio poderoso. Puede alterar las circunstancias, cambiar la manera de pensar y sacar la verdad de Dios a la luz. Epafras oraba de rodillas por la iglesia y Pablo se unía a él, lo cual vemos en su oración en Colosenses 1.7, 9-14.


¿Tiene usted un corazón apesadumbrado? ¿Se siente impotente para remediar la situación? Si es así, siga el ejemplo de Epafras y Pablo: vaya a Aquel que sabe exactamente qué hacer y que tiene el poder de lograrlo. Después, descanse en Él y deje que la paz de Dios guarde su corazón y su mente.


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martes, 22 de agosto de 2023







 

Hasta que ...

Efesios 4.13

 hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo;

 

La fuente de nuestra identidad

 Leer | 1 Pedro 2.9, 10


¿Con qué frecuencia nos evaluamos basándonos en nuestros sentimientos, y no en lo que Dios dice? El problema es que nuestros sentimientos no son constantes. Nunca sabemos qué circunstancias surgirán para poner a prueba nuestra fe.


Tal vez hoy su auto no arrancó, el jefe le ha estado causando problemas, venció el día del pago de la hipoteca y está corto de dinero. En esos momentos, puede ser difícil pensar de sí con “cordura” (Ro 12.3). Pero recuerde que Satanás hará todo lo que pueda para que aparte su atención del Señor. Cuando dirigimos nuestra atención hacia las circunstancias en vez de hacerlo hacia la Palabra de Dios, aceptamos lo que parece indicar la situación o lo que otros dicen, en vez de lo que el Señor nos señala.


Entonces, ¿qué dice la Biblia acerca de nosotros? El pasaje de hoy llama a los creyentes “linaje escogido”, “real sacerdocio” y “pueblo adquirido por Dios”. Y nuestro propósito es: “que [anunciemos] las virtudes de aquel que [nos] llamó de las tinieblas a su luz admirable”.


Qué alentador es saber que hemos sido llamados a la luz admirable de Dios. Sin embargo, a menos que recibamos ayuda, no somos capaces de escapar de las “tinieblas” de nuestras circunstancias. Como creyentes, tenemos el poder del Espíritu Santo que nos permite vencer las desalentadoras percepciones que tenemos de nosotros, y las tácticas manipuladoras de Satanás.


Cuando las circunstancias parezcan insoportables, recuerde que el Señor pagó un precio para comprarle (1 Co 6.20). Despierte cada día sabiendo que usted es valioso para su Padre celestial. Confíe en la Palabra de Dios, no en sus sentimientos, y deje que el Espíritu Santo cambie su percepción.


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lunes, 21 de agosto de 2023







 

Alabanzas a Dios por su grandeza

 Tienes disponible en el Canal el tema de estudio para escuchar al seguir el enlace

https://www.ministeriotv.com/video/alabanzas-a-dios-por-su-grandeza-26313


Siendo agradecidos a la manera de Dios

 Escucha este tema que inspira, enseña y fortalece nuestra vida espiritual, visita}

https://www.ministeriotv.com/video/siendo-agradecidos-a-la-manera-de-dios-26314

La Paz con Dios

 Romanos 5.1-2


Un día le pregunté a una camarera que me servía a la mesa. “Si usted pudiera pedirle algo a Dios, ¿qué le pediría?” Su respuesta fue inmediata: “Quiero sentir paz”. Con lágrimas en los ojos, me dijo que su abuela había muerto y esto la tenía turbada emocionalmente.


Muchos en nuestro mundo son como esa joven; desean tener paz interior, pero no tienen ninguna relación con el Señor. Muchas veces, las personas buscan satisfacción intentando mejorar su aspecto, su condición física, su situación económica, o su nivel social —o consumiendo drogas. Pero tales cosas no pueden dar paz al corazón o a la mente. Solo una relación con el Señor Jesús conduce a una paz verdadera.


Antes de ser salvos, éramos esclavos del pecado y vivíamos enfrentados a Dios (Col 1.21). Nuestras rebeliones habían creado una barrera entre Él y nosotros, que no podíamos cruzar con nuestras propias fuerzas. Sin la intervención de Dios, no podríamos haber encontrado el sendero de la paz. Pero nuestro Padre celestial dio la solución perfecta para nuestro problema del pecado. Envió a su Hijo para que Él pagara por nuestras transgresiones y eliminara la separación que había entre Dios y nosotros.


Cuando pusimos la fe en Cristo como nuestro Salvador, fuimos reconciliados con Dios (Ro 5.10). En Cristo, tenemos paz para con el Padre.


Nuestro Dios trino ha dado todo lo necesario para que tengamos paz interior. El Padre celestial nos abrió el camino para que seamos parte de su familia. Jesús ofrece su paz para que podamos experimentar serenidad (Jn 14.27). Y el Espíritu Santo cultiva el fruto de la paz en nuestra vida (Ga 5.22).


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viernes, 18 de agosto de 2023



 

Invertir para la eternidad

Mateo 28.18-20


La vida cristiana es una vida activa dedicada a trabajar, servir, compartir y ayudar. Muchas veces pensamos que ser cristiano significa solo ir a la iglesia cada domingo por la mañana y ofrendar. Es un buen hábito, pero si esa es la totalidad de su vida cristiana, entonces debo decirle que está equivocado.


Jesucristo ha hecho el llamado a todos sus seguidores de ir al mundo y hacer discípulos, bautizarles y enseñarles. Usted dirá: “Bueno, eso es para los pastores y los misioneros”. No, no es así. Es, en realidad, la responsabilidad de todos los que invocan el nombre de Jesús.


Observe la primera palabra de Mateo 28.19. ¿Qué dice Jesús? Dice: “Id”. En palabras de hoy, está diciendo: “¡Salgan del sofá! ¡Apaguen el televisor! ¡Cierren la computadora! ¡Levántense, miren el mundo a su alrededor, y háblenle a alguien de Mí!”


No se trata de una sugerencia, ni tampoco es una palabra solo para un puñado de creyentes. Si usted ha sido salvado por la sangre de Cristo, ¡Jesús también le está hablando a usted!


Hacer discípulos no significa dejar el trabajo y convertirse en misionero a tiempo completo en un lugar remoto de la Tierra. Usted puede salir, tocar la puerta de su vecino y presentarle a Cristo. No necesita predicar sermones impresionantes a los demás, sino simplemente tener un corazón abierto y dispuesto a cumplir con el llamado que le ha sido hecho por Jesucristo.


¿Qué pudiera hacer usted ahora mismo para “ir y hacer discípulos”? Piense en las cosas que puede hacer hoy para responder al llamado de Dios a su vida.


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jueves, 17 de agosto de 2023








 

Confiar en la fuente

 1 Reyes 17.8-16


Desde la perspectiva de Dios, tener una necesidad puede ser beneficioso espiritualmente. Si nuestra situación económica decae, descubriremos que la ayuda viene de la mano de Dios. El Señor utiliza diversos instrumentos para suplir nuestras necesidades, pero solo Él es la fuente de todo lo que tenemos o ganamos.


Dios puede usar métodos tradicionales o extraordinarios para lograrlo. Elías había aprendido a vivir por fe mediante la manera insólita como el Señor lo había alimentado: por medio de unos cuervos. Luego Dios lo envía a Sarepta, a una viuda necesitada que no podía darle de comer.


Toda necesidad económica es una oportunidad para aprender a andar por fe en el Señor como nuestra fuente. La prosperidad material puede llevarnos a tener una sensación de independencia que no nos deja ver lo incapaces que somos para suplir nuestras propias necesidades.


Por creer que Dios proveería, Elías fue testigo de la intervención milagrosa de Dios. Es posible que no veamos al Señor actuando de una manera sobrenatural en nuestra situación económica. Sin embargo, podemos estar seguros de que, así como le cumplió a Elías su promesa, Él también será fiel a su Palabra en nuestra situación. “Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús” (Fil 4.19).


¿Está usted enfocándose en el instrumento o en la fuente de su provisión? El medio que Dios utilice puede cambiar, pero su fidelidad permanece para siempre. Él es infinitamente más confiable que cualquier empleador o plan de jubilación. El Señor le está invitando a confiar en Él y a vivir en la seguridad de una vida de fe.


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miércoles, 16 de agosto de 2023






 

La perseverancia en la oración

 Leer | Romanos 12.10-13


Como pastor, hablo con muchas personas sobre su vida espiritual. Por estas conversaciones, sé que la mayoría no están satisfechas con su vida de oración. Les falta esperanza y fe, y el tiempo con Dios les parece vacío. Esta es la razón por la que muchos cristianos oran tan poco y tan desapasionadamente.


Ayer comenzamos a ver los obstáculos para una vida vigorosa de oración. Veamos hoy un obstáculo más que bloquea la comunicación vibrante entre Dios y nosotros: La impaciencia.


La mayoría de nosotros hemos traído, en algún momento, nuestras súplicas al Señor Jesús con intensidad, pero no hemos visto los resultados deseados. Lamentablemente, los seres humanos somos, por naturaleza, de poco ánimo. Nos cansa pedir cuando lo único que percibimos es silencio. Recordemos, sin embargo, que Dios no es nuestro sirviente; Él no actúa en el instante preciso que lo llamamos. De hecho, si pudiéramos ver el panorama completo tal como Él lo ve, esperaríamos con gusto su plan y su momento.


En realidad, creo que somos bendecidos al no recibir todo lo que pedimos. Si estamos totalmente satisfechos con la presencia del Señor, nuestra relación con Él florece, aunque no recibamos todo lo que pidamos.


Si clamamos a Dios con empeño y nada cambia, es posible que con el tiempo se creen barreras; pero siga orando. Más allá de esta “pared”, usted sentirá la presencia de Dios, donde encontrará paz, gozo y destellos maravillosos de su gloria, independientemente de la respuesta que reciba.


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martes, 15 de agosto de 2023




 

La comunión con Dios

 Leer | Filipenses 3.7-10


Dios creó al hombre y a la mujer para que se relacionaran con Él. El tipo de comunión que disfrutaron al comienzo Adán y Eva con el Señor es también el que estaba destinado para nosotros. Pero después de entrar el pecado en el mundo, todo cambió. La relación de intimidad que Dios quería tener con la humanidad se rompió, y esa dañada condición ha pasado de una generación a otra.


Pero, como sabemos, ese no es el final de la historia. Dios envió a su Hijo Jesucristo a morir en nuestro lugar, trayendo perdón por nuestros pecados y restaurando nuestra relación con Él. Por fe en Cristo, somos adoptados en la familia de Dios y pertenecemos a Él para siempre, tal como el Señor quiso que fuera originalmente. Dios nos ha dado todo lo que necesitamos para relacionarnos con Él.


Pero ¿qué sucede si, después de ser salvos, no madura nuestra relación con Cristo? Podemos perder nuestro fervor inicial por el Señor, dejar de leer la Biblia y no asistir con regularidad a la iglesia. Lamentablemente, son muchos los que tratan de concentrarse en el Señor, pero dejan que los asuntos terrenales los distraigan. Pero para quienes hacen de Jesús la prioridad de su vida, tienen una relación más profunda, que va más allá de cualquier vínculo terrenal.


La comunión con Dios hizo que el alma de David quedara “satisfecha como de un suculento banquete” (Sal 63.5 NVI). Pablo veía sus logros como nada en comparación con “la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús” (Fil 3.8). Acérquese al Padre celestial, y experimente la bendición de conocerle.


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lunes, 14 de agosto de 2023




 

La alabanza a Dios

 Echa un vistazo en el Canal y escucha este tema importante y de bendición a tu vida, te esperamos

https://www.ministeriotv.com/video/la-alabanza-a-dios-26299

Las virtudes de un corazón agradecido

 Ya puedes acceder al tema visitando el Canal al seguir el enlace provisto a continuación

https://www.ministeriotv.com/video/las-virtudes-de-un-corazn-agradecido-26298


Fortaleza en el Señor

 1 Samuel 30.1-8


Después de un agotador viaje de tres días, David y sus hombres llegaron finalmente a casa para encontrarse con una escena devastadora. Sus viviendas habían sido destruidas totalmente por el fuego, y no hallaron a sus familias. Se sumieron en una desesperación total, pero la aflicción de David aumentó enseguida cuando el dolor de sus hombres se convirtió en amarga ira, y hablaron de apedrearlo.


La mayoría de nosotros no experimentaremos esta situación extrema, pero sí podemos identificarnos con el desaliento de David. A veces, después de una tragedia personal viene la desesperación; pero también puede ser el resultado del agotamiento que causan las presiones diarias. Los problemas que sufrimos a diario pueden hacer que el desaliento se vuelva un acompañante constante. Lo mismo puede suceder con las luchas emocionales por los sentimientos de falta de valía, no poder vencer una adicción, el dolor de la crítica, o el temor de la incompetencia.


Muchas veces no podemos evitar las situaciones que nos conducen al desánimo, pero sí tenemos la alternativa de permanecer o no en esa condición. En vez de rendirse a la desgracia, David eligió fortalecerse en el Señor. Reconoció que Dios era el único que podía darle la perspectiva correcta en el problema, y la dirección que necesitaba.


Cuando usted se siente desanimado, ¿a dónde acude? Quizás lo último que quiera hacer es leer la Biblia y orar; al comienzo, los pasajes podrán parecer palabras inútiles, y sentir que sus oraciones son vacías. Pero si usted se mantiene clamando a Dios, al final encontrará el poder consolador.


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jueves, 10 de agosto de 2023




 

Señor y Redentor

 Te comparto el enlace ha este hermoso tema disponible en el Canal, visítanos en

https://www.ministeriotv.com/video/seor-y-redentor-26289

La autoridad de nuestro mensaje

 1 Reyes 17.1


El primer pensamiento del rey Acab, después de encontrarse con el profeta Elías pudo haber sido: ¡Qué presumido! ¿Qué se creerá este tipo que es? Elías entró en escena y confrontó al impío rey de Israel con un mensaje que pronto afectaría la vida de todas las personas en la región.


La validez de la revelación de Elías dependía de la Fuente, no del emisario. Elías era un hombre de gran fe que creía lo que Dios le decía; podía hablar valientemente con autoridad, porque conocía a Aquel que le daba el mensaje. Pasaba tiempo a solas con el Señor, y escuchaba cada una de las palabras que Él le decía.


No debemos esperar que nuestro Padre celestial nos hable exactamente de la misma manera que hablaba a los profetas en el Antiguo Testamento, aunque la forma de recibir su mensaje no haya cambiado. Comienza con estar a solas en su presencia e implica escuchar mientras Él habla por medio de su Palabra. Lo cual no debe quedarse allí.


Los profetas tenían la responsabilidad de decir a las personas lo que el Señor les indicaba. Asimismo, nosotros debemos contar lo que aprendemos de la Palabra de Dios. El tiempo devocional con el Señor no se trata de nuestros intereses y necesidades. El Padre celestial nos bendice para que podamos bendecir a quienes nos rodean.


Comience cada día a solas con Dios leyendo su Palabra y orando, escuchando lo que Él dice a su corazón. Crea lo que el Señor afirma en la Biblia, aplíquelo a su vida y comparta con alguien más lo que Él le ha indicado. Sea valiente, y recuerde que la autoridad del mensaje viene del Señor Jesucristo.


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martes, 8 de agosto de 2023




 

La entrega incondicional

 Leer | 1 Reyes 20.1-4


Dar poder absoluto sobre nuestra vida a otro ser humano sería una posibilidad aterradora. Pero aceptar y reconocer la autoridad del Señor sobre nosotros es conveniente y correcto.


La entrega incondicional significa:


• Rendirnos —incluyendo todo lo que tenemos y todo lo que somos— al señorío de Cristo. Se trata de una identificación con Él en la que nosotros mermamos y Él crece. Primero nos entregamos a Él, y después vivimos en obediencia.


• No poner límite en lo que estamos dispuestos a hacer o llegar a ser. Esto significa que en nuestra vida no hay áreas restringidas en que el Señor Jesús no esté invitado; que no hay nada reservado para nuestro uso exclusivo, y que no hay nada que le impidamos tocar. Nos ponemos totalmente a su voluntad —cuándo, dónde y cómo Él decida.


• Transferir a Cristo la propiedad de nuestro cuerpo, alma y espíritu. Al hacer esto, aceptamos como nuestros propios valores los preceptos de las Bienaventuranzas (Mt 5.3-12), el fruto del Espíritu (Gá 5.22, 23), la jerarquía del reino (Mr 9.35), el sufrir por causa de Cristo (1 P 4.13), y morir a nuestro propio yo (Gá 2.20).


Una razón por la que tendemos a no rendirnos es el temor: ¿Qué me exigirá el Señor que haga? Otra piedra de tropiezo es el egocentrismo: Me gusta tener el control de mi agenda y de mis planes a largo plazo. Un tercer obstáculo es el orgullo: Yo sé lo que Dios quiere que haga, pero ¿no puede Él ver cómo pudiera eso afectar mi reputación?


¿Qué le impide entregarse al Señor Jesús, y clamar: “Por favor, toma el control total de mi vida”?


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lunes, 7 de agosto de 2023




 

Un seguro contra todo riesgo

 Ya puedes disfrutar escuchando el estudio del tema de epígrafe, disponible en el Canal al seguir el "link" que aparece a continuación

https://www.ministeriotv.com/video/un-seguro-contra-todo-riesgo-26285

Trampas en la vida que afectan nuestra relación espiritual con Dios

 Tema de actualidad, edificante y de bendición a tu vida.  Sigue el enlace provisto a continuación 

https://www.ministeriotv.com/video/trampas-en-la-vida-que-afectan-nuestra-relacin-espiritual-con-dios-26286

Tres maneras de pensar bien

 Filipenses 4.4-9


Todos queremos tener paz y alegría en los momentos difíciles; sentirnos seguros y con la confianza de que el Padre celestial nos ama. Pero, muchas veces, no experimentamos tales cosas por las preocupaciones y otras presiones.

Existen tres maneras de controlar nuestros pensamientos:

Filtrándolos. Imagínese que hay un sistema de red que protege su mente, y que todo lo que usted piense debe primero pasar por él. Si ha creado su filtro basándose en la Palabra de Dios, cualquier idea no bíblica que trate de introducirse activará una alarma de advertencia. Puede chequear cada pensamiento haciéndose algunas preguntas: ¿Cuál es su fuente? ¿A dónde me llevará? ¿Es bíblicamente sano? ¿Va a edificarme o a derribarme? ¿Puedo compartir esto con otra persona? ¿Me hace sentir culpable? ¿Encaja con quien soy como seguidor de Jesucristo?


Seleccionándolos. Dios le ha dado el derecho y el poder para decidir si aceptará o no un pensamiento. Cada vez que una opinión o una enseñanza lleguen a su filtro, puede resolver dejarlas pasar o descartarlas. Si la idea no le parece ni mala ni buena, las mismas preguntas anteriores podrán ayudarle a saber qué hacer después.


Cultivándolos. Aceptar los buenos pensamientos (y rechazar los malos) no es suficiente. Necesitamos meditar en las ideas que se alineen con la Palabra de Dios, y después comenzar a ponerlas en práctica.


Permita que Dios se derrame en su vida y que reine en su mente. Al hacerlo, verá cambios impresionantes.


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Tema de Agosto

 Escucha todos los detalles para que te unas y compartas la causa seleccionada para este mes de agosto, sigue el vínculo hacia el Canal, te esperamos

https://www.ministeriotv.com/video/tema-de-agosto-26272

Evento

 Estás invitad@, todos los detalles al seguir el "link"

https://www.ministeriotv.com/video/evento-de-agosto-26271

miércoles, 2 de agosto de 2023




 

Las fuerzas para mantenerse firme

 Leer | Efesios 3.14-21


Sabemos quién es nuestro enemigo, y podemos incluso estar vestidos para la batalla (Ef 6.11). Pero no siempre nos sentimos preparados, debido a que nuestras debilidades parecen grandes y nuestras fuerzas pequeñas.


Para mantenernos firmes en esta vida, necesitamos el poder de nuestro Señor actuando en nosotros, lo cual requiere oración seria y continua (v. 18). Si nos comunicamos con el Padre celestial, el Espíritu Santo nos dará discernimiento para que podamos reconocer las verdades en cuanto a la guerra espiritual y las tácticas del adversario (1 Co 2.14). Comenzar cada mañana con el Señor nos dará las fuerzas para permanecer firmes para Cristo, sin importar lo que nos tenga reservado el día.


La oración es un elemento esencial para nuestra protección contra el diablo. Si no somos personas de oración —es decir, si no buscamos la dirección de Dios y olvidamos ponernos su armadura cada día— seremos derrotados. Nuestro discernimiento y nuestra visión sin el Señor son demasiado limitados, y el enemigo es demasiado poderoso para que lo enfrentemos solos. No obstante, Romanos 8.37 nos dice que, con Dios, seremos más que vencedores. Él nos preparará si nos acercamos a Él por medio de la oración, escuchamos sus instrucciones, y seguimos adelante con obediencia.


El enemigo le teme a las oraciones que se hacen por medio de la fe en Jesucristo, porque no tiene ninguna defensa contra ellas. La oración perseverante nos fortalece y aplasta el poder de Satanás (Stg 4.7). Caiga de rodillas en oración ante el Señor, y vea lo que pasa.


Por Min. En Contacto

martes, 1 de agosto de 2023






 

Evento de Agosto

 Ya puedes unirte al Evento de este mes y compartirlo, para los detalles visita el Canal siguiendo el vínculo provisto a continuación, te esperamos, gracias.

https://www.ministeriotv.com/video/evento-de-agosto-26271

Tema de Agosto

 Te comparto la causa por la cual unirnos en el Tema de este mes de agosto, pasa la voz, para los detalles visita el enlace a continuación

https://www.ministeriotv.com/video/tema-de-agosto-26272

Proclama 2023

 Aquí te comparto el enlace hacia la Proclama de este año como recordatorio del compromiso de estar unidos en el clamor.  Participa y comparte

https://lagloriaesdedios.blog/2023/08/01/proclama-47/


Fe y obediencia

 Leer | 1 Reyes 18.1-15


Piense en la fe y la obediencia como compañeras de viaje que se dirigen al mismo destino, es decir, agradar y dar gloria al Señor. Usted no puede tener una sin la otra. Crecen simultáneamente al practicarse, pero se marchitarán si se descuidan.


Elías era un hombre con ambas cualidades. Le creía a Dios, y siempre respondía con obediencia. Cuando el Señor le dijo que se presentara ante el rey Acab, no dejó que el temor lo detuviera. Había aprendido que el Padre celestial era fiel y digno de confianza.


El temor pone trabas a la fe cuando comenzamos a dudar de que el plan de Dios sea realmente el mejor. Si permitimos que la preocupación gane terreno en nuestra mente, nos negaremos a hacer lo que diga el Señor. Al rechazar el camino de la fe y la obediencia estamos en realidad eligiendo la senda de la incredulidad y el pecado.


A Satanás le encanta que sintamos temor y desobedezcamos, para que así no recorramos el camino que Dios ha ideado para nosotros. No podemos creer que el Señor hará cosas grandes en un aspecto de nuestra vida si estamos permitiendo que haya pecado en otro. ¿Dónde ha flaqueado usted? ¿Le ha dado terreno al pecado? ¿Está negándose a obedecer algo que Dios dice en su Palabra?


La fe grande comienza con pasos pequeños. Si usted decide obedecer la Palabra de Dios, comenzará un ciclo cada vez mayor de fe y obediencia. No deje que el temor o el pecado le roben la gran aventura que el Señor ha planificado para su vida. ¿Quién puede elegir mejor el camino correcto —usted o Dios?


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