lunes, 7 de abril de 2014

Un canto en la noche de una tragedia

Un canto en la noche de una tragedia

En 1873 la ciudad de Chicago fue asolada por un gigantesco incendio. La familia Spafford perdió gran parte de sus bienes. Dos años más tarde planeó viajar a Europa. En el último momento, Horatio Spafford tuvo un impedimento y sólo su mujer Anna y sus cuatro hijas embarcaron a bordo del “Ville du Havre”.

A lo largo de la travesía, otro barco, el «Loch Earn», chocó contra él e hizo que se hundiese en menos de un cuarto de hora. Anna, inconsciente, fue rescatada por la tripulación del «Loch Earn», pero las cuatro chicas fueron engullidas por las aguas. Algunos días más tarde, Anna envió a su marido un breve mensaje: «Salvada, sola». Horatio se embarcó para ir a su encuentro. Durante esa travesía compuso el himno: «Alcancé salvación». Ese himno trajo consuelo y paz a un gran número de cristianos en medio del dolor. A continuación le presentamos la adaptación en español:
***
De paz inundada mi senda ya esté,
O cúbrala un mar de aflicción,
Mi suerte cualquiera que sea, diré:
Alcancé, alcancé salvación.
***
Ya venga la prueba o me tiente Satán,
No amenguan mi fe ni mi amor;
Pues Cristo comprende mis luchas, mi afán
Y su sangre vertió en mi favor.
***
Feliz yo me siento al saber que Jesús,
Libróme de yugo opresor;
Quitó mi pecado, clavólo en la cruz:
Gloria demos al buen Salvador.
***
La fe tornaráse en gran realidad
Al irse la niebla veloz;
Desciende Jesús con su gran majestad,
¡Aleluya! Estoy bien con mi Dios.

Por: La buena semilla