miércoles, 15 de marzo de 2023

Quitémonos la carga

 «Pon tu camino en las manos del Señor; confía en él y él se encargará de todo.» Salmo 37:5

¿Se ha sentido alguna vez como si las demandas de la vida fueran demasiadas? Yo sí. Después de haber pasado casi la tercera parte de vida estudiando, sé lo que es sentirse abrumado por las exigencias de los maestros y profesores. Muchas veces me sentí como si estuviera yendo por la vida cargando una cantidad de libros pesados sobre mi espalda.

Hay veces en que la vida se siente así, como si fuera una carga pesada de llevar. Quizás lo atribuyamos a los estudios, o las exigencias del trabajo, o las demandas de ser padres. Es la carga de todas las responsabilidades y también es la carga del pecado.

Como personas pecadoras a menudo sentimos el peso de pensar, hablar y actuar en formas que van en contra de lo que es la voluntad de Dios para nuestras vidas. Cada día que pasa vamos acumulando más pecados y la carga se va haciendo cada vez más pesada. Dios nos recuerda que no tenemos por qué vivir así. En el Salmo 37:5, el Rey David dice: «Pon tu camino en las manos del Señor; confía en él; y él se encargará de todo.» La palabra generalmente traducida como «pon» viene de la idea de sacar o quitar de encima de algo una piedra grande. Dios quiere que le demos a él la carga del pecado que tanto nos pesa. Jesús ha cargado sobre sí mismo nuestros pecados y su castigo y los ha llevado sobre su espalda al Gólgota y a la tumba.

Confiemos en el Dios que obra por nosotros no sólo en Viernes Santo, sino también en Pascua, cuando nuestra mayor carga es quitada de encima para siempre. Encomendémonos a Jesús, el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo.

Padre celestial, nos presentamos ante ti abrumados por el peso de nuestro pecado y de las demandas de la vida. Te pedimos que envíes tu Espíritu Santo a nuestros corazones para que, con fe renovada, descarguemos todas nuestras cargas en el trono celestial. En el nombre de Jesús. Amén.

Pastor Andrew Menz

Por CPTLN