viernes, 24 de marzo de 2023

El motivo de la carrera

 El motivo de la carrera

«Por lo tanto, también nosotros, que tenemos tan grande nube de testigos a nuestro alrededor, liberémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante.» Hebreos 12:1

Cada músculo duele; respirar se hace difícil; las manos se duermen; se siente como si se va a perder el conocimiento. ¿Será que estoy sufriendo alucinaciones?, se pregunta. Estos síntomas no los experimenta quien vuelve a hacer ejercicio después de mucho tiempo de inactividad. Al contrario, son las reacciones que sufren quienes han corrido una maratón de 26.2 millas. Sus cuerpos se sienten como si se hubieran chocado contra una pared.

En la lectura para hoy, el autor compara la carrera espiritual con correr una maratón, porque, al igual que esta, la carrera espiritual puede ser extenuante.

Sin embargo, el mensaje que recibimos en el texto para hoy nos dice algo diferente. Es cierto que la carrera es difícil, pero en vez de preocuparnos por lo difícil que es, ponemos nuestra mirada en Jesús porque él ya la corrió antes que nosotros. A pesar de las burlas y el castigo que recibió, Jesús corrió con alegría hacia la cruz porque sabía que en esa cruz el pecado, la muerte, y el diablo habrían de ser destruidos de una vez y para siempre.

En este tiempo de Cuaresma en que concentramos nuestra atención en lo que el Salvador hizo por nosotros a través de su muerte y resurrección, fijemos nuestra mirada en él, el siervo sufriente que ya ha corrido y ganado la carrera. Y recordemos que él va con nosotros dondequiera que nosotros vayamos.

Dios Padre, gracias por habernos hecho tuyos a través de las aguas del Santo Bautismo. Danos el coraje y la fuerza para correr la carrera de esta vida como lo hizo nuestro Salvador. Ayúdanos a permanecer fieles, sabiendo que un día estaremos unidos contigo para siempre. En el nombre de Jesús. Amén.

Pastor Bill Weiss

Por CPTLN