lunes, 13 de septiembre de 2021

El Señor es mi ayuda

 “Dios ha dicho: ‘No te desampararé, ni te abandonaré’. Así que podemos decir con toda confianza: ‘El Señor es quien me ayuda; no temeré lo que pueda hacerme el hombre.'” Hebreos 13: 5b, 6.

Hay veces en que las tormentas de la vida nos acosan sin darnos respiro, y nos sentimos como que ya no tenemos más recursos para seguir adelante.

Si se ha sentido así en algún momento, quiero que escuche la historia verídica acerca de un castillo escocés que fue sitiado por enemigos. Los enemigos habían acampado fuera de las murallas del castillo, por lo que sus habitantes se encontraban prisioneros dentro de él.

Luego de varios meses, los enemigos estaban seguros que los habitantes del castillo debían estar a punto de morir de hambre, por lo que, muy confiados, enviaron mensajeros con la demanda de que se rindieran inmediatamente. Como respuesta, los habitantes del castillo les tiraron pescado fresco a través de la muralla.

Por medio de un pasaje subterráneo que llegaba al mar, habían logrado abastecerse de alimento fresco durante todo ese tiempo.

¿Cómo se aplica esto a nuestras vidas? Cuando esté abrumado por los problemas de la vida, sepa que en Jesús puede encontrar la ayuda y la fuerza que necesita para seguir adelante. Los amigos y familiares pueden ser de alguna manera una fuente de ayuda, pero no podemos contar con ellos todo el tiempo.

La única ayuda real que esta vida puede ofrecernos, la encontramos en el Salvador. Él nos ha prometido que jamás nos dejará ni nos abandonará. Él se ha ofrecido a escuchar nuestras oraciones, a caminar a nuestro lado, y a ayudarnos a llevar nuestras cargas.

No sé quién o qué me acechará en el día de hoy. Pero sé que tengo un Salvador que está siempre dispuesto a ayudarme.

Por CPTLN