martes, 31 de agosto de 2021

Confiando plenamente en Jesús

 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.

Gálatas 2:20

Hudson Taylor, uno de los primeros misioneros cristianos en entrar en China en 1854, tenía una vida de fe excepcional. Experimentó que Dios, en su amor, su poder y su fidelidad, puede darnos una salida en las situaciones más difíciles. ¡Qué descanso cuando dejamos a Jesucristo la dirección de nuestra vida! La biografía de Hudson Taylor comprende una voluminosa correspondencia. A continuación podemos leer un fragmento:
«Ahora creo que las luchas, los esfuerzos, las aspiraciones, el esperar días mejores, no son el verdadero medio para llegar a la felicidad, a la santidad, a una vida útil. El más santo es el que posee mejor a Cristo dentro de sí y se goza totalmente en su obra cumplida en la cruz.


Se trata de descansar, de no hacer esfuerzos para luchar; de poner la mirada en Jesús, de confiar en él para vencer… de descansar en el amor de un Salvador todopoderoso, gozosos por tener una salvación completa y porque estamos liberados del pecado. No se trata de luchar para tener la fe, sino de mirar a Aquel que es fiel, y de confiar totalmente en él, pues prometió que permanecería junto a mí y que nunca me abandonaría.
No pensemos que esta experiencia, estas verdades, son sólo para una minoría. Ellas están al alcance de cada hijo de Dios.


El único poder para ser liberado del pecado o para consagrarse realmente a Dios es Jesucristo.

Enviado por el Hno. Mario Caballero