Es posible que en algún momento hemos experimentado un camino tortuoso sea a pié, en bici o auto, crae malestar, retraso, problemas físicos, al medio de transporte, tener accidentes que pueden conllevar enfrentar la ley, justicia, llevarnos a necesitar recuperar, ingresar en un hospital o llegar al extremo de la muerte. Comparando el pecado y su efecto podemos decir que el pecado lleva por un mal camino, uno tortuoso, que retrasará la avanzada en las vidas y llevando ha extremos de alejarles de Dios y su obra maravillosa para sus vidas dañando a otros y a sí mismo. La Palabra de Dios llama bienaventurado, es decir, feliz el que no anda en pecado.
Decide hoy no andar en camino de pecado, acude a Dios en arrepentimiento en el nombre de Jesús y seras perdonado viviendo bienaventurado siendo nueva criatura.
Salmos 1 )1b) Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos, Ni estuvo en camino de pecadores
