martes, 19 de agosto de 2014

Hay una fuente en mí




Sediento en el camino y desesperado
te hicistes presente
haciendo una fuente inagotable
en medio de un terreno árido y seco
Y ahora brota, ahora fluye sin detenerse
dentro de mí
Ya no hay más sequedales
sino corrientes de aguas vivas por todo mi ser



Salmos 105:41: Abrió la peña, y fluyeron aguas;
 Corrieron por los SEQUEDALES como un río.